Introducción
La barrera sangre-aracnoides o subaracnoidea es una de las barreras hemáticas que constituyen un sistema de protección del sistema nervioso central que afecta el paso de sustancias desde los capilares al líquido cefalorraquídeo .
Figura 1.Barrera sangre-aracnoides o subaracnoidea. Localizada entre la pared de los grandes vasos durales y subaracnoideos y el líquido cefalorraquídeo del espacio subaracnoideo - como el espacio subaracnoideo espinal- Está formada por células planas aracnoides las cuales se adhieren a la pared de los vasos de la duramadre - como la duramadre espinal - 1
Esta barrera se altera en el contexto en el que se desarrolla la sensibilización central: inflamación de la médula espinal
Fig 2. Inflamación de la médula espinal. (A) En condiciones normales,los linfocitos T no infiltran el sistema nervioso central debido a que la barrera hematoespinal está intacta. Tampoco se observan en la médula espinal células presentadoras de antígenos clásicas (ejm: células dendríticas). Es posible observar un microambiente inmunosupresor que evita fenómenos inflamatorios . Las elementos neuronales del asta dorsal de la médula espinal funcionan normalmente. (B) Tras una lesion primaria o una disfunción de la actividad de las terminales centrales de las fibras aferentes primarias . Las terminales centrales de las fibras aferentes primarias expresan mediadores proinflamatorios que incluyen los factores quimiotácitos CCL2 y CX3CL1, que hacen que activen la microglía y actúen sobre las células de la membrana facilitando la permeabilidad de la membrana hematoespinal. Los linfocitos T activados (expresan LFA-1) penetran en el asta posterior de la médula espinal interviniendo en la inflamación neurógena. El cambio de ambiente inmunosupresor facilita su supervivencia.
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Última actualización el 28/09/2020