GENERALIDADES SOBRE LA CONVERSIÓN DE LAS VÍAS DE ADMINISTRACIÓN Y LA APLICACIÓN DE DOSIS ANALGÉSICAS
Una de las claves para un adecuado tratamiento farmacológico del dolor es la individualización de los tratamientos mediante la titulación de las dosis y la frecuencia de los fármacos analgésicos pautados. Por ello, es necesario instruir a los facultativos con guías que incluyan dosis para cada vía de administración específica y algoritmos de conversión de dosis, pues existen razones clínicas que obligan habitualmente a cambios de vías de administración e, incluso, fármacos del mismo grupo farmacológico (tabla 1 ). En todo caso, se busca obtener la dosis óptima que alivie el dolor y que no produzca efectos adversos
Tabla 1. Razones clínicas que nos obligan a la conversión de los fármacos analgésicos empleados o de las vía de administración durante el tratamiento del dolor agudo o a la rotación de opioides*
Ausencia de efecto analgésico |
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Presencia de efectos secundarios intolerables |
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Cambio en la situación del paciente |
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Consideraciones prácticas |
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* Rotación de opioides : Es la sustitución de un opioide por otro. Su efectividad se basa en la observación que hay pacientes que no toleran un opioide y sí otro.
A continuación se dan una CONSIDERACIONES A TENER EN CUENTA A LA HORA DE REALIZAR LA CONVERSIÓN DE LAS VÍAS DE ADMINISTRACIÓN . En otro apartado se especifica la CONVERSIÓN DE LAS VÍAS Y DOSIS EQUIANALGÉSICAS TENIENDO EN CUENTA EL FÁRMACO ANALGÉSICO